La "Manzana verde" es un nuevo barrio de uso mixto en una antigua zona industrial de la ciudad de Málaga, en el sur de España, que se está construyendo siguiendo principios de sostenibilidad y cohesión social. En 2017, la ciudad de Málaga, en el sur de España, publicó un concurso de innovación arquitectónica centrado en la creación de espacios verdes accesibles para aumentar la cohesión social y la biodiversidad local, contribuyendo al mismo tiempo a la mitigación y adaptación al clima. En 2019, los estudios de arquitectura ganadores se adjudicaron el proyecto. La construcción se basa en cuatro vectores urbanos y sociales: complejidad urbana, metabolismo urbano, biodiversidad urbana y cohesión social, habitabilidad del espacio público y movilidad sostenible. Configurado como un polígono de más de 90.000 metros cuadrados, el distrito se basa en elementos de la ciudad tradicional mediterránea. Esto significa que el distrito será compacto en su construcción, complejo en la mezcla de usos, y cercano a los servicios ciudadanos básicos, incorporando sistemas de ahorro y eficiencia de recursos. Como ecobarrio, el distrito "Manzana verde" utilizará criterios de certificación ecológica en el tratamiento de los materiales y residuos procedentes de los movimientos de tierras, la urbanización del suelo y la construcción, contribuyendo a la creación de una economía circular.